.

¡Bienvenidos GESTARCITOS!

Eden, Astor , Dante y Juan Cruz
¡Bienvenidos!

Esta tribu que los acompañó adentro del útero de mama

los recibe con un cálido abrazo, lleno de luz y amor.


¡Felicidades a las nuevas familias!


Este jueves 31 de marzo vendrán Mayra y Gil a compartir el relato del parto en el CENTRO GREYG BORGES 2295 (ESQUINA CHARCAS)a las 19:15.

¡¡¡Los esperamos!!!


Equipo Gestar

.

Marzo en Gestar, con mas talleres para seguir creciendo

Este jueves los esperamos de 19:15 a 20:15 hs. con

TRABAJO CORPORAL CON ESFERODINAMIA

de 20:15 a 21:15

Partos institucionales y domiciliarios.
Proyección de videos de PARTOS ARMONIZADOS Gestar


Los esperamos!!!!!!!!!!!!!


.

Gestando intensivos! En palabras de Flor Ottaviano

El intensivo era el domingo 6 de marzo. Pero como todo lo que tiene vida se mueve, y en Gestar estamos llenos de eso, ese día temprano recibimos la noticia de que se suspendía. ¡Uhhh!

Porque Mercedes estaba en trabajo de parto. ¡Ahhh!
Supongo que todos pensamos en Mercedes y Diego esa mañana. Al mediodía recibimos el mensaje de que Astor había nacido con un parto hermoso.

Y supongo que a todos nos alegró el día.

El intensivo se hizo el lunes 7. Fue en Pacheco, en una quinta hermosa, llena de árboles y plantas, una pileta inmensa y unos anfitriones súper generosos, Flor y Diego.

Fuimos llegando todos, agrandando el círculo de mate y medialunas, siempre bendecidos por la diosa madre en el medio. Una vez juntos, nos presentamos y contamos nuestras expectativas para el día venidero. Cris trajo sus cartas mágicas y cada uno recibió junto a su pareja un mensaje divino. Algunos lo compartieron y nos animamos a interpretarlas.

Después caminamos descalzos por el pasto, que nos invitaba a seguir a Miriam con confianza, a reírnos y así soltarnos.

Nos separamos en tres grupos: uno que representaría el trabajo de parto, otro el parto y otro el puerperio. Cada grupo jugó y pensó cómo representaría ese momento. Y en un anfiteatro natural observamos que con sorprendente sintonía, cada instancia le seguía armoniosamente a la siguiente.

Luego jugamos a ser una marioneta. El desafío era soltarse por completo, mientras los demás movían nuestras extremidades.

Y al fin, ¡pileta! Todos la esperábamos, pero justo en ese momento comenzó una leve llovizna. Amedrentó a algunos, aunque el llamado a cantar canciones de la infancia otorgó el calor necesario para que todos participaran, y al ritmo de cada canción la llovizna mermaba y el sol salía más fuerte. En la pileta también hicimos mandalas, espirales, en los que cada uno era uno pero también formábamos un todo. Y donde cada bebé nos unía en formas armoniosas y orgánicas.

¡A comer! Como en las formas de la pileta, cada uno aportó algún manjar al banquete. Se veían muchos colores y muchas cosas caseras. Así nos compartimos el amor y la generosidad de cada uno. Durante la comida nos contaron un parto y nos hablaron del masaje infantil, del que luego tuvimos una pequeña demostración. También participó el bello Renzo, un gestarcito.

Dormimos una siestita profunda, y recién salidos del ensueño Diego nos explicó algunas cosas sobre los cuencos de cuarzo y nos propuso un ejercicio en el que fuimos entrando con absoluta confianza. Disfrutamos del sonido milagroso que provenía de los cuencos y de cada uno de nosotros. ¡Fue tan poderoso que a Gil se le mejoró su dolor de espalda!

Otro integrante del equipo Gestar, Alexis, vino a visitarnos con su hijo Alejo. Nos respondió junto a Cris y a Mir algunas preguntas sobre el parto, la cesárea, y los cuidados del bebé. Cris nos dio ejemplos concretos de estos casos.

Para los que están cerca y aún no lo habían hecho, hubo traspaso del dolor. Y con alivio, lo traspasaron todos.

Entrada la tarde vimos el video del parto de Renzo, en tiempo real y con todos los protagonistas presentes, que generosamente nos compartieron ese momento de intimidad y milagro. Nos hicieron reír, emocionar y abrir la boca sin poder cerrarla, generando un silencio sagrado como aquello que observábamos.

Otra vez en el jardín pero ya oscureciendo, bailamos juntos, nos abrazamos y compartimos una palabra que representara lo vivido. Hubo agradecimiento, felicidad, confianza, conciencia, descubrimiento y más. Así, casi sin poder despegarnos, con la alegría de que nuestros hijos nos unieran en este camino, nos fuimos yendo. Ya de noche, cansados, agradecidos, felices.

.

Intensivo 6 de febrero de 2011

.